3.4. Antropometría: proporciones, variabilidad y tipologías humanas
El interés por las medidas y proporciones humanas es intrínseco al propio individuo y a la manera de relacionarse con su entorno más inmediato. El hombre ha intentado siempre modificar su entorno y adaptar todos los elementos que lo configuran a sus propias necesidades. Históricamente la generación y la optimización de los objetos se realizaba por medio de una adaptación, continua y progresiva, de los objetos, gracias a los conocimientos que proporcionaba el uso y la experimentación de las cosas. Pero las sucesivas evoluciones tecnológicas y científicas han puesto siempre de manifiesto la necesidad de conocer, a priori, los condicionantes y las características que son decisivos en la planificación de los objetos, productos y servicios.
La complejidad técnica y productiva de los sistemas y dispositivos actuales ponen su foco de atención, una vez más, en el estudio de la reciprocidad interactiva entre personas y objetos. Entre las características definitorias de estos objetos debemos tener en cuenta sus dimensiones y su correspondencia con las medidas de los sujetos que los manipulan. De hecho, en la práctica diaria, todas las actividades que realizan los individuos dependen de la ayuda que las cosas les proporcionan y de su utilización para conseguir sus objetivos y deseos. La antropometría nos proporciona conocimientos y recursos para mejorar esas actividades.